Introducción
“Es como si dentro de cada persona se pudiera encontrar un gran diamante. Ese diamante tiene mil facetas, pero todas están cubiertas de polvo y brea. La misión de cada alma es limpiar cada una de las facetas hasta que la superficie este brillante y pueda reflejar un arco iris de colores.
Ahora bien, algunos han limpiado muchas facetas y relucen con intensidad. Otros solo han logrado limpiar unas pocas, que no brillan tanto. Sin embargo, por debajo del polvo, cada persona posee en su pecho un luminoso diamante, con mil facetas refulgentes. El diamante es perfecto, sin un defecto. La única diferencia entre las distintas personas es el número de facetas que han limpiado. Pero cada diamante es el mismo y cada uno es perfecto.
Y todos los diamantes son perfectos”
Del libro “muchas vidas, muchos maestros”
Nosotr@s
Mireia Juaristi – MANDARA
Empecé a practicar yoga a los 25 años, después de acabar la carrera de Ingeniería que cursé en Mondragón y Toulouse. Desde entonces, la práctica del yoga me ha acompañado en mi vida, desde que lo conocí ha estado siempre conmigo. Trabajé en una empresa relacionado con mis estudios en Ingeniería. Nunca me ha gustado lo que hacía ni he sentido que era lo que quería, y así pasaron los años entre idas y venidas. Sin embargo sí que sentía ganas de profundizar en el yoga, e incluso de asistir a las clases que se imparten en el Ashram de Cestona, pero mis miedos no me dejaban dar los pasos hacia lo que yo sentía que quería hacer, supongo que esto que digo de los miedos se puede comprender.
Por fin decido hacer el Curso Primero de Profesores de Yoga en el Ashram y ahí se produce un punto de inflexión grande en mi vida. Al año siguiente mi profesora de yoga deja sus clases y me da, junto a una compañera, la posibilidad de impartir clases de Yoga. Cosas de la vida, por aquel entonces estoy buscando algo para impartir clases de yoga y me salió la oportunidad en Anzuola. Sentía que se presentaba una oportunidad y en el 2019 dejo mi trabajo y decido dedicarme a dar clases de yoga.
Me tocó la pandemia, y a pesar de estar dos años conviviendo con ella, sigo dando clases en Anzuola y también en Mondragón (Arrasate). Para empezar, no podía salir mejor.
En Mondragón surge un contratiempo, el local donde doy clases está en venta y aparece alguien que se interesa por él. Es aquí donde me planteo más en serio lo de impartir clases y en noviembre de 2021 abro Mandara Yoga Eskola.
Soy madre de dos niños, de 9 y 11 años, y mi actividad es impartir clases de yoga.
Actividades
Hatha Yoga
Meditación
Mantras
Horarios: se indica la hora de comienzo y clases de hora y media.
Lunes
09:00
14:30
17:00
18:45
20:30
Martes
09:00
14:30
17:00
18:45
Miércoles
09:00
14:30
17:00
18:45
20:30
Jueves
09:30
14:30
17:00
18:45
Viernes
17:30
Contacto